Sunday, February 18, 2024

Mano santa

Paty no puede entender que una persona como yo crea en la suerte. Para mi mujer la realidad no es más que una maraña de causas y consecuencias, un gran caos. El destino no existe, solo la mirada atenta del ginecólogo, los conteos de espermatozoides y los tratamientos de fertilidad. Yo no soy doctor pero también tengo dos ojos y un cerebro, y con esas mismas herramientas llego a mis propias conclusiones sobre lo que me sucede o me deja de suceder. Sé que mis testículos, para dar un ejemplo, órganos en perfecto estado, no son responsables —por no decir culpables— por el niño o la niña que se empeña en hacernos desesperar con su ausencia. Hay algo más ahí, una fuerza superior que rige lo que acontece en nuestras vidas y en la de nuestro hipotético bebé. Yo le echo la culpa a la fortuna, Paty a mis testículos.

Extracto de «Mano santa», uno de dos cuentos que se publicaron en el número cuarenta y siete de la Revista Literaria Trinando en febrero del 2024.